1º de maio: «La desmemoria/4» de Eduardo Galeano e dous affiches de Jules Grandjouan

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Celebro o 1º de maio, Día do Internacionalismo Proletario, nesta bitácora coa publicación de dous gravados (affiches) creados para a xornada de 1906 e 1907 por un dos precursores do cartelismo político, o anarquista Jules Grandjouan, cuxos contidos son aínda de plena vixencia a día de hoxe.
E reproduzo tamén o relato «La desmemoria/4» de Eduardo Galeano, tirado do seu marabilloso El libro de los abrazos (Editorial Siglo XXI), que se basea nos acontecementos de Haymarket (Chicago) en 1886, que o movemento obreiro converteu nun dos seus alicerces.
La desmemoria/4
El libro de los abrazos
Eduardo Galeano
Chicago está llena de fábricas. Hay fábricas hasta en pleno centro de la ciudad, en torno al edificio más alto del mundo. Chicago está llena de fábricas, Chicago está llena de obreros.
Al llegar al barrio de Haymarket, pido a mis amigos que me muestren el lugar donde fueron ahorcados, en 1886, aquellos obreros que el mundo entero saluda cada primero de mayo.
-Ha de ser por aquí-, me dicen. Pero nadie sabe.
Ninguna estatua se ha erigido en me moria de los mártires de Chicago en la ciudad de Chicago. Ni estatua, ni monolito, ni placa de bronce, ni nada.
El primero de mayo es el único día verdaderamente universal de la humanidad entera, el único día donde coinciden todas las historias y todas las geografías, todas las lenguas y las religiones y las culturas del mundo; pero en los Estados Unidos, el primero de mayo es un día cualquiera. Ese día, la gente trabaja normalmente, y nadie, o casi nadie, recuerda que los derechos de la clase obrera no han brotado de la oreja de una cabra, ni de la mano de Dios o del amo.
Tras la inútil exploración de Haymarket, mis amigos me llevan a conocer la mejor librería de la ciudad. Y allí, por pura casualidad, descubro un viejo cartel que está como esperándome, metido entre muchos otros carteles de cine y música rock.
El cartel reproduce un proverbio del África: Hasta que los leones tengan sus propios historiadores, las historias de cacería seguirán glorificando al cazador.